Este pueblo también conserva vestigios de la cultura indígena de la Sierra Nevada de Santa Marta, los que se pueden apreciar en Taironaka, un lugar de tradición y arquitectura que guarda los vestigios de los aborígenes de Región.
Es un lugar mágico, lleno de naturaleza, aire puro y hermosos paisajes. Hogar de muchas especies, donde es común encontrarse con ardillas, iguanas, sapos y micos, que contrastan con las aguas mansas del río Piedras, un verdadero paraíso Tayrona.